Cero monopolios
Todos los monopolios, ya sean estatales o privados, terminan ofreciendo productos caros, mala calidad y pésimo servicio.
Como dueños, se supone, del petróleo que somos, y como consumidores de tantos derivados del mismo que somos también todos, lo que más nos conviene es poner a competir a muchas empresas para explorar, extraer y procesar el petróleo para maximizar la renta petrolera (otorgar concesiones temporales en licitación a quien más regalías ofrezca por barril extraído) y para tener derivados (gasolinas, aceites, gradas, plásticos, fertilizantes, etc.) al menor costo posible.
Los monopolios son por definición ineficientes y costosos. Ya basta de nacionalismos bananeros que nos mantienen en el retraso. Otorgar concesiones a una empresa privada no es privatizar el petróleo, es contratar a la empresa que mayores beneficios nos dé extrayendo ese recurso. ¿Para qué queremos poner todos los huevos en una canasta? Entre más empresas haya compitiendo entre sí, menos riesgo para los dueños del petróleo y mayores regalías habrá por su extracción.