¿Víctimas del mismo dolor?

El día de hoy en la editorial del Sr. Otilio Cantú Gzz. en El Norte dice que comparte el mismo dolor que Humberto Moreira y vuelve a acusar al Presidente Calderón por "su guerra" y los miles de muertos entre ellos los hijos de ambos.

 

Humberto Moreira siempre criticó el uso de las Fuerzas Armadas en la lucha contra el crimen organizado y no permitió que operaran en Coahuila. Se dice que negoció, explicita o implícitamente, con el crimen para dejarlos operar. Incluso su hermano, el actual gobernador de ese estado, afirmó que hubo quienes pensaron se podía convivir con el crimen. Ahora están pagando las consecuencias de haber dejado crecer ese mal y lamentablemente los alcanzó en lo personal. Coahuila es prueba de que el crimen y la violencia no surgieron por el uso de las Fuerzas Armadas, si no todo lo contrario.

 

Con todo respeto por el dolor que sufre el Sr. Cantú, le diría que si Natividad González Parás, Rodrigo Medina, y todos los alcaldes, desde hace 10 años a la fecha hubiesen hecho su trabajo, no habríamos necesitado que el Ejército y la Marina patrullaran nuestras calles, y seguramente su hijo no habría muerto, al igual que miles de personas más que han muerto en manos de los criminales.

 

Es lamentable que su hijo haya muerto a manos de militares y reprobable que éstos hayan querido cubrir su error plantándole un arma, los culpables deben ser castigados con todo el peso de la Ley. Pero ese tipo de casos aislados no anula todo lo positivo que han hecho las Fuerzas Armadas. ¿Cómo estaríamos si Calderón los hubiera mantenido en los cuarteles? Ahí está Coahuila de ejemplo para recordarnos cómo empezó todo.