Comentarios sobre México y sus políticos

"Es más fácil desintegrar un átomo que un prejuicio" (Albert Einstein)

"El castigo que los hombres buenos tienen que pagar por no estar interesados en la política es ser gobernados por hombres peores que ellos mismos" (Platón)

"La derecha cree en el libre mercado, la izquierda en la libertad social, y ambas no se dan cuenta que uniéndose se forma el liberalismo" (Sergio Sarmiento)

lunes, abril 28, 2014

Comentarios, respuestas y más preguntas

El día de hoy la noticia en las redes sociales fueron las 10 preguntas que Alfonso Cuarón, director de cine y recién galardonado con un Oscar, le hace al Presidente Enrique Peña Nieto sobre la Reforma Energética. En la explicación previa a las preguntas (que no son 10, sino 14, pues en algunos puntos hizo 2 y hasta 3 preguntas) reconoce su ignorancia en el tema pero acusa que el proceso de la reforma fue oscuro, y que el gobierno no ha informado los alcances. Por eso hace las 10 preguntas que podrían disipar algunas de sus dudas.

 

Quienes me leen en las redes sociales conocen mi opinión sobre Peña Nieto y su gobierno. Nadie podrá acusarme de ser un #comelonches o un #peñabot. Todo lo contrario. Sin embargo creo que Cuarón peca de inocente en sus preguntas, que son válidas pues cualquier mexicano tiene derecho a exigir información del gobierno. Pero también es nuestra responsabilidad  como ciudadanos informarnos sobre los temas trascendentales del país. ¿O acaso Cuarón creerá en las respuestas (si es que se las dan) del gobierno peñista sin cuestionar ni una coma?

 

Aunque no tengo el alcance mediático de Cuarón, como Ingeniero Mecánico Electricista con maestría en administración conozco bastante del tema energético y económico, sin considerarme experto, por eso me atrevo a emitir mi opinión. En éste link podrán leer las preguntas de Cuarón: http://diezpreguntas.com/2014/04/28/158/  Y a continuación mis comentarios, respuestas y más preguntas en el mismo orden:

 

1.- No sé si Cuarón lo ignora, pero en México las tarifas de los energéticos son muy variadas. Preguntar sin ser específico a qué precios se refiere, es muy vago. Las tarifas domésticas de electricidad tienen subsidios, dudo que los aumenten. Quizá quienes verán una reducción en sus costos eléctricos serán quienes hoy pagan más que en otras partes, como la tarifa DAC o las comerciales e industriales, en la medida en que se abra el mercado y haya empresas que compitan directamente con la CFE.

 

Las gasolinas no bajarán, aunque Peña Nieto y su gobierno quieran dorar la píldora en sus spots. El subsidio que teníamos ya se eliminó. Subsidio que beneficiaba al 30% más rico de la población que somos quienes tenemos automóvil. Si Cuarón espera beneficios en costos, creo que ha sido muy inocente al creerle al PRI y sus mentiras. Yo espero un beneficio tan simple como la libertad de escoger al proveedor de electricidad o la marca de gasolina que se me pegue la gana. La que me de mejor precio, calidad y servicio. No estoy esperando que el gobierno me siga subsidiando mi consumo energético.

 

Sobre los tiempos, pues todo dependerá de las leyes secundarias, que están negociando todos los partidos, y la ejecución de las mismas. No depende de la palabra del Señor Presidente.

 

2.- Las afectaciones específicas al medio ambiente no serán mayores o diferentes a las que ya PEMEX hace. De hecho las empresas privadas tienen mejores controles de seguridad que PEMEX partiendo del hecho que no están plagadas de corrupción como “nuestra” paraestatal lo que conlleva un riesgo alto de productos, equipos, de mala calidad. Creo que inclusive la respuesta e información en los problemas o desastres será mayor, pues hoy en día al ser PEMEX parte del gobierno, la opacidad es la regla.

 

3.- La 3er pregunta de Cuarón se contrapone en intención con la 1ª. Pedir tarifas de energéticos no renovables reducidas es incongruente con la exigencia de más energías renovables. De hecho, el único plan (acción) que se requiere para que exista un “boom” en tecnología y uso de energías renovables no contaminantes es eliminar los subsidios en electricidad y gasolina e inclusive aplicar impuestos verdes. Simplemente con eso, la iniciativa privada, los consumidores, libremente empezaremos a usar más energías alternativas.

 

4.- Pregunta válida para todo el actuar del gobierno, pero irrelevante en el contexto de la aprobación de la reforma energética. Es decir, la corrupción ya existe y debe reducirse independientemente de si se aprueba o no la reforma energética. Independientemente de si una paraestatal, PEMEX, o múltiples empresas privadas (nacionales o extranjeras) extraen el petróleo en México.

 

5.- El mismo caso que la pregunta 4, es válida pero para todo el actuar del gobierno. De hecho hoy ya hay voces que acusan de que las televisoras, principalmente Televisa, tiene mucho poder sobre las decisiones del gobierno. El financiamiento ilícito y presiones de grupo (no solo empresariales, sino también del crimen organizado, sindicatos, y otros grupos de poder) ya existen, independientemente de la reforma energética. Condicionar una reforma a la solución de esa problemática es condenarse al ostracismo en materia de energía, que es lo que mueve al país.

 

6.- Las herramientas regulatorias son precisamente las que se discuten en las leyes secundarias en éstos momentos. Más que plantear preguntas sería mejor hacer propuestas. Desde mi opinión, las licitaciones de los campos, con reglas claras en cuanto a cancelación por incumplimiento, como se hace en Noruega, resuelve este problema potencial.

 

7.- Excelente pregunta que si toca un tema que han dejado al margen todos los partidos, no solo el gobierno de Peña Nieto, ¿qué límites se le impondrán al sindicato? Ya se ha dicho por varias voces, tan reconocidas como Cuarón, que si se pretenden hacer del STPRM un sindicato de industria y encasquetárselo a todas las nuevas empresas que inviertan solo causaría que la inversión sea cero, sería el fracaso de la reforma. La eliminación de todos los privilegios del sindicato es condición necesaria, aunque no suficiente, para asegurar una mejora en la productividad de PEMEX.

 

8.- Aquí Cuarón se equivoca. En ningún año PEMEX ha aportado más del 50% del presupuesto federal. Lo más que ha aportado ha sido cerca de un 40%, pero en los últimos 15 años ha rondado entre el 30 y el 40%. No es poco, pero no más del 50% y menos por un lapso de 70 años. La propuesta del PRI, que es de dominio público, es empezar a reducir las aportaciones de PEMEX a partir del 2020 (convenientemente dos años después de que Peña Nieto deje el poder) y sería hasta a partir del 2025 cuando aplicaría al 100% el nuevo esquema fiscal para la paraestatal. Quién sabe si para dentro de 10 años PEMEX estará produciendo tanto petróleo como ahora. Pero independientemente de la reforma fiscal, para el 2025, los ingresos fiscales ya no deberán depender tanto de los petroleros.

 

9.- Una pregunta semejante a la 4ª y 5ª, válidas pero de forma general, no sólo en el contexto de ésta reforma. ¿Qué hará el gobierno para asegurar que ya no crezca la burocracia? Independientemente de la reforma energética. Mi opinión, la única forma que se aseguraría eso es algo como lo que hizo Brasil, pero que aquí no se propuso. Habría que hacer que PEMEX cotice en bolsa y darle acciones a cada ciudadano mexicano. De esa forma los dividendos irían a parar directamente a las manos de los dueños del petróleo, sin pasar por el fisco, sin quedar en manos de la burocracia. ¿Qué opina Cuarón de una propuesta así?

 

10.- Aquí  Cuarón reseña 2 sucesos que se contraponen. La quiebra de 1982 fue por un estatismo exacerbado. Y la de 1994-95 por pésimas privatizaciones. Si no se da la reforma energética para modernizar y abrir el sector, nos quedaríamos en un escenario como el previo a 1982. Si se abre de mala manera, estaríamos en un escenario como el de la crisis de los 90’s. Yo prefiero apertura, pues dejar todo en manos del estado ya sabemos que es manejado de manera ineficiente y corrupta. Una concesión se podrá revocar si no cumple lo estipulado. Pero continuar con la situación actual de PEMEX está probado que es inviable.

 

Lo que México necesita es crecer por sí mismo, por su gente, sus servicios, sus manufacturas. Si México crece como país bananero, basado en la exportación de crudo, nunca saldremos del hoyo. Para que México crezca a tasas aceleradas la energía debe estar disponible a precios competitivos. Ojo, competitivos no significa subsidiados, baratos. Pero la energía más cara es la que no se tiene. Que todas las empresas y personas de México paguemos el costo real de la energía, pero que nunca nos falte. Eso es lo que nos hará competitivos y nos garantizará el crecimiento. El debate sobre la renta petrolera está mal enfocado. ¿De qué nos sirve una renta potencial de algo que no podemos sacar y vender? ¿De qué nos sirve una renta petrolera que se quedará en manos de burócratas y políticos? Mejor que la empresa que garantice sacar más petróleo, al menor costo, pagando sus respectivos ISR, ISPT, ISAN, y regalías,  lo haga, de tal forma que toda la sociedad tengamos energía disponible, crecimiento económico, más empleos y oportunidades.